ARRIBA: Una mujer joven vestida como Nuestra Señora de Guadalupe participó en la celebración anual “Honra a tu Madre”, que reunió a cientos de católicos de toda la diócesis por un día de festividades y oración el 2 de diciembre. (Billy Hardiman/CATHOLIC SUN)

Rosalía Vega, de 8 años, pertenece a la danza Guadalupana y viajó desde Flagstaff el pasado 2 de diciembre para participar en el evento Honra a Tu Madre en honor de la Virgen de Guadalupe en el centro de Phoenix, para conmemorar las milagrosas apariciones de la Madre de Dios al indio San Juan Diego, ocurridas en diciembre de 1531 en el Cerro del Tepeyac.

Al igual que ella, alrededor de 25 integrantes de dicha danza (varios de ellos niños) tuvieron que levantarse alrededor de las 3 de la mañana, prepararse y viajar tres horas hasta Phoenix para participar en la pre procesión y posteriormente en la multitudinaria procesión que incluyó la participación de 19 carros alegóricos con representaciones de las apariciones guadalupanas, así como casi 70 grupos de cientos de danzantes, matachines, chinelos, ballets folklóricos y tlacololeros.

https://twitter.com/thecatholicsun/status/937010659123957760

This slideshow requires JavaScript.

Cansada pero feliz de haber danzado durante dos horas para la Virgen Morena, Rosalía dice que con gusto vendrá de nuevo al evento del año pasado.“Me gusta mucho danzarle a la Virgen”, expresó mientras es abrazada por su mamá Mayra Hernández.

Otro que se ve cansado, pero también contento por participar por tercer año consecutivo es Isaías Luna, de 8 años e integrante de la danza Guadalupana de la Parroquia Perpetuo Socorro en Glendale.

Un poco cohibido, sólo atina a responder cuando se le pregunta si le gusta danzar para la Virgen: “Sí me gusta mucho y quiero estar aquí otra vez el año que viene”.

En su décima segunda edición, el evento religioso y cultural Honra a Tu Madre, organizado por el apostolado Ministerios de María, con el patrocinio de la Parroquia Inmaculado Corazón de María y la Basílica Santa María, con el auspicio de la Diócesis de Phoenix, reunió a miles de personas de diferentes ciudades varias parroquias de la diócesis.

Más videos/fotos

#HonraATuMadre vía The Catholic Sun por Twitter

Todos ellos ataviados con atuendos autóctonos, representando al indio San Juan Diego y a los indígenas que le danzaron a la Morenita del Tepeyac cuando se convirtieron al catolicismo, una vez que se enteraron que dejó su imagen grabada en el ayate de Juan Dieguito.

“Estamos aquí no para ofrecer un show, sino para ofrecer a la Virgen de Guadalupe nuestros pasos y nuestros bailes”, dijo Daniel Anaya, director de la danza Morenita del Tepeyac, perteneciente a la Parroquia San Vicente de Paul.

Cientos de bailarines matachines, con su atuendo folclórico, llenaron las calles céntricas de Phoenix el 2 de diciembre en una deslumbrante procesión, honrando a Nuestra Señora de Guadalupe y recordando sus apariciones a San Juan Diego. (Billy Hardiman/CATHOLIC SUN)

Comentó que esa danza, integrada por 25 niños, jóvenes y adultos, participan en el evento Honra a Tu Madre desde que se realiza hace 12 años, y es su intención seguir participando.

Por su parte, María Sapién, un feligrés de la Parroquia Santa Catarina de Siena y directora del ballet folklórico “Esto es México”, expresó su alegría de estar con sus niños y jóvenes en esa procesión en honor de la Guadalupana. “Este es el ballet que originalmente comenzó con el nombre de ‘Reyes María Ruiz’; y aquí estamos todos con mucho gusto participando”, dijo.

A su vez Severo Ríos, de los Chinelos de Chilpancingo, dijo que llevan 5 años asistiendo y participando en esta celebración, en la que veneran a la Virgen de Guadalupe con sus singulares bailes.

El Obispo Thomas J. Olmsted y el Obispo Auxilio Eduardo A. Nevares ofrecen sus bendiciones a las fieles participando en la procesión de Honra A Tu Madre, la fiesta en honor de la patrona de la Diócesis de Phoenix (Billy Hardiman/CATHOLIC SUN)

Llamado a defender a los inmigrantes

El Obispo Nevares pidió defender a los ‘DREAMers’ y a los demás indocumentados. (Billy Hardiman/CATHOLIC SUN)

Como cada año la procesión de Honra a Tu Madre concluyó con una solemne Misa concelebrada por los Obispos Thomas J. Olmsted y Eduardo A. Nevares, quienes dieron su bendición a todos los participantes.

La homilía estuvo a cargo del Obispo Nevares, quien tanto en inglés como en español comenzó hablando de la igualdad entre los hombres sin importar su raza, género ni condición social.

También recordó que la Virgen de Guadalupe quiso aparecérsele a un humilde indito de nombre Juan Diego, y que muchas veces Dios manifestó sus designios a través de los más pobres, insignificantes y vulnerables.

El obispo auxiliar tuvo un fuerte mensaje sobre el tema de los “DREAMers” y en general del asunto de inmigración.

“A ustedes y a mí nos toca vivir otra gran calamidad en nuestros tiempos. … Se trata de la ley de inmigración”.

Reconoció que cada país tiene el derecho de tener leyes y de proteger sus fronteras, “pero las leyes de este país están quebradas”, advirtió, al tiempo de señalar que hoy en día si alguien quiere venir a este país legalmente su proceso puede tardar hasta 15 años.

Sobre los jóvenes que están inscritos en el programa DACA, señaló que están en peligro de ser deportados a sus países de origen.

This slideshow requires JavaScript.

A todos los ahí presentes se les entregó una tarjeta con una carta para los senadores federales de Arizona John McCain y Jeff Flake, a quienes se les pide proteger y defender a los DREAMers y para que promuevan una reforma migratoria comprehensiva.

El Obispo Nevares les pidió que se comprometieran a enviarla a los senadores, a lo que todos respondieron a una sola voz que sí la mandarán.

“Es tiempo de ser grandes cristianos y seguidores de Dios … de pelear por esas personas más vulnerables, nuestros hermanos indocumentados”; particularmente los DREAMers, insistió.

Dijo que es necesario luchar por cambios en las leyes de inmigración que causan tantos sufrimientos a los indocumentados.

“Es tiempo de pararnos y defender los derechos humanos de nuestros hermanos”, remató el obispo.