Nueva coronilla fortalece trabajo espiritual de San Vicente de Paúl

“Recemos siempre por nosotros: el uno por el otro”.

Esas fueron algunas de las primeras palabras que el Papa Francisco compartió y ejemplificó desde el balcón papal. También son similares a lo que se dice ahora entre la vasta comunidad asociada con la Sociedad de San Vicente de Paúl en Phoenix.

Físicamente, las palabras “ora por nosotros mientras oramos por tí” se colocan al final de una tarjeta de intención de oración, que circuló por primera vez entre los donantes a través del correo postal. La petición de oración se ha vuelto algo viral. Esas tarjetas de intención de oración están ahora ampliamente disponibles para individuos y familias que SVdP asiste a su campus principal y lo de servicios humanos, en los comedores de Mesa y Sunnyslope, y en la mayoría de las despensas de alimentos Vicentinos a través de la Diócesis de Phoenix. También están disponibles para completar durante una visita al hogar, y los voluntarios también pueden enviar alguna intención.

Cualquiera que complete una puede marcar entre ocho categorías de intenciones de oración: renovación de la fe, empleo remunerado, enfermedad, miembros de la familia, paz mundial y justicia entre ellos; o completar una intención especial en el espacio en blanco que se proporciona. Fueron tantos los que optaron por este último que la tarjeta fue rediseñada con mayor espacio de escritura.

En respuesta, hay una nueva manera tangible de saber por qué se rezan las intenciones de oración: la Coronilla de la Sociedad de San Vicente de Paúl. Es una derivación del rosario tradicional de dedo, cuyas 10 cuentas estacionarias se alinean en el exterior de un anillo de metal. La Coronilla de SVdP tiene cinco juegos de tres cuentas alrededor de la circunferencia, con el logotipo reconocido globalmente de la organización benéfica encima de la cruz.

Cada Vicentino que ofrece una Coronilla de SVdP reza cinco series consecutivas de una oración del Padre Nuestro, Ave María y Gloria. Su creador, Jack Ahern, prevé que los “Vicentinos Jubilarios” sigan involucrados en el retiro por medio de la coronilla. El Beato Federico Ozanam, quien estableció la Sociedad de San Vicente de Paúl en 1833 (y de quien recibe el nombre del refugio de transición para individuos de Phoenix, Ozanam Manor), es llamado a la intercesión.

“Todo el concepto es ayudar a los Vicentinos a rezar unos por otros, por nuestros partidarios y por aquellos a quienes servimos y por sus intenciones”, dijo Ahern, quien ha sido Vicentino durante casi 40 años.

Para recolectar intenciones específicas, diseñó una Caja de Intención de Oración. Es similar a las cajas de recolección monetarias con una ranura y un ojo de cerradura del tamaño de un papel, pero la caja de intención de oración es un madera robusta, tiene un bolsillo lateral de una pulgada para tarjetas de intención en blanco, un bolígrafo montado y un letrero que amablemente dice: “Sólo tarjetas de Oración. No hay efectivo en el interior”. Las tarjetas de intención de oración pueden estar en inglés, español o bilingües.

La conferencia de Ahern, en la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en Glendale, llevó a cabo una prueba en el otoño pasado. Se colocó una caja de intención de oración en el vestíbulo para los partidarios y en la despensa de alimentos para los clientes Vicentinos. Los Vicentinos también ofrecieron llenarlos durante las visitas domiciliarias. La parroquia recibió 90 intenciones en un lapso de dos semanas y el párroco bendijo las intenciones en la Misa.

Los Vicentinos oran por las intenciones recogidas en el nivel de la conferencia parroquial durante sus reuniones regulares. Se les anima a ofrecer esa guirnalda por su cuenta, también. A Ahern le resulta fácil hacerlo mientras está en el automóvil.

Las intenciones de oración recogidas en los comedores y en el campus principal y lo de servicios humanos de SVdP van directamente al cuidado de Cynthia Bach, la responsable del cuidado espiritual de SVdP. Los recolecta a diario, los lee y ora personalmente por las intenciones que guarda éticamente. El personal y los visitantes generalmente oran por ellos durante la Misa semanal en su campus principal donde se colocan las tarjetas de intención en el altar.

La pila podría ser tan gruesa como tres pulgadas en solo dos semanas. El año pasado recibió aproximadamente 2,000 tarjetas de intención de oración por las cuales pedir.

“Pasaré una buena hora todos los días orando por estas intenciones en las tarjetas”, señaló Bach. Ella también lleva rutinariamente las tarjetas de intención de oración entregadas a la Misa en la Basílica Santa María. Luego, el 18 de cada mes, las lleva con ella a la Misa de Sanación en la Parroquia Católica Maronita San José, donde se usa aceite sagrado para ungir las tarjetas.

John Junker, director de Servicios de Apoyo Vicentinos, comparó a Bach con una presentadora medieval como Juliana de Norwich, quien se dedicó a una vida de oración. Fue idea de Bach llevar las peticiones a la parroquia Maronita, y es Bach quien organiza estudios bíblicos en Sunnyslope, un círculo de oración regular con residentes de la Casa solariega Ozanam y asistencia a Misa para los residentes que lo buscan.

Junker aclaró que a nadie al que SVdP sirve se le pide que ore, “pero dar la oportunidad habla de la necesidad de servir a toda la persona, no sólo a la persona hambrienta”.

“Es importante validar que estamos orando por ellos. Que no sean olvidados. Este ministerio es absolutamente lo que estamos llamados a hacer. “Cuando consideras las oraciones de alguien y oras con ellas, eso les da esperanza”, dijo Bach.

Una base espiritual es un trabajo Vicentino, y las intenciones de oración siempre giratorias junto con la Coronilla de SVdP, que tiene planes para crecer en la Diócesis de Phoenix y luego expandirse nacional e internacionalmente, ayuda a mantener a los Vicentinos en modo de oración.

Cuando Ahern se acercó al presidente internacional de SVdP, Renato Lima, sobre la idea cuando este último visitó la Diócesis de Phoenix en febrero, Ahern dijo que el presidente ofreció su aprobación. También espera promoverlo en la próxima Asamblea Nacional de la sociedad en Denver a fines de agosto.

Sí, cuando la gente escucha a San Vicente de Paúl, piensan en ayudar a los pobres, recalcó Junker, pero en el orden correcto. “El primer objetivo de la sociedad es construir la espiritualidad de sus miembros. El segundo objetivo es invitar y ayudar a otros a servir, y el tercero es ayudar a los pobres”.

Los Vicentinos están trabajando en la creación de una versión escolar de las tarjetas de intención, porque los estudiantes están muy involucrados con la SVdP por medio de campañas de recolección de alimentos, unidades de pañales y visitas a los comedores y al campus principal.